En el año 2018 inició un proyecto para digitalizar el acceso a sus instalaciones, para evitar que sus empleados tuvieran que atender de manera personal a los usuarios que accedían a sus instalaciones, identificando el tipo de vehículo y posterior cobro.
La solución propuesta e implantada en uno de los accesos a Mercasevilla, se trata de un eToll a doble altura, que puede cobrar tanto con efectivo como con tarjeta bancaria. Durante la pandemia, Mercasevilla apostó más aun por automatizar los accesos, comprando una segunda unidad para evitar que sus empleados reducir al mínimo el contacto en aquellos lugares donde hay una afluencia de usuarios importante como es en la entrada de sus instalaciones.